Unción de los enfermos
¿Está alguno enfermo entre ustedes? Que llamen a los ancianos de la iglesia y que oren por él, ungiéndolo con aceite en el nombre del Señor. Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará. Y si ha cometido pecados, le serán perdonados.
--Santiago 5: 14-16
Este Rito Sacramental incluye oraciones por la sanación física, mental y espiritual de quienes la necesitan. Llame a la Oficina Parroquial para solicitar la unción en casa o en la Oficina Parroquial. La unción también se ofrece después de la misa de las 8:00 a. m. de cada primer sábado de mes.
El nombre Jesús significa «Dios salva». El nombre enfatiza que Jesús es quien vino a salvar a todos. Cristo significa «ungido». El nombre muestra que Dios Padre le dio a Jesús una misión y le otorgó el poder de salvar y sanar.
Toda la vida de Jesús estuvo orientada a la salvación de la gente. Sus palabras y acciones son el fundamento de la gracia salvadora que ahora recibimos en los sacramentos.
El sacramento que une a quienes sufren con el poder salvador y sanador de Jesús es la Unción de los Enfermos. Mediante este sacramento, las personas reciben perdón de sus pecados y consuelo en su sufrimiento; se restauran espiritualmente; y a veces, incluso recuperan la salud física.
El sufrimiento es parte de la vida, pero Jesús une nuestro sufrimiento a su pasión y muerte para que, a través de él, participemos en su obra salvadora y sanadora. El sacramento también nos recuerda que Dios quiere consolar a quienes sufren y quiere que aliviemos el sufrimiento donde podamos.
En el Sacramento de la Unción de los Enfermos, el sacerdote unge a los enfermos graves, heridos o ancianos con el óleo de los enfermos. Este óleo es un aceite especial que se utiliza para el Sacramento de la Unción de los Enfermos. Lo bendice el obispo en la Misa Crismal de Semana Santa.
Además de la unción, a menudo se ofrece la Sagrada Comunión. Cuando una persona está muriendo, la Comunión se llama viático (en camino contigo). Para una persona moribunda, el sacramento es una preparación para el paso a la vida eterna.